El municipio de Mirandela está situado en el corazón de Trás-os-Montes y Alto Duero, marcado por dos valles de baja presión por los que discurren los ríos Tuela y Rabaçal, que se unen al norte de la ciudad y forman el río Tua, que desemboca en el Douro.

Estos pueblos ofrecen un variado y rico patrimonio natural, paisajístico, cultural y artístico, fruto de siglos de historia -como lo demuestran los monumentos megalíticos, los castros y los numerosos restos de fortificaciones de la Edad del Hierro construidas a lo largo de los valles o la aparición, en la Edad Moderna del patrón de la Casa dos Távoras. Su historia está marcada cuando en 1250, mediante carta de D. Afonso III, se creó el Municipio de Mirandela. Unos años más tarde, por Carta de transferencias aprobada por D. Dinis, en 1282 la ciudad fue trasladada de “Castelo Velho” a Cabeço de S. Miguel, donde hoy se ubica su Centro Histórico; y en 1884 comenzó a tener sus límites geográficos actuales.

Pero su orgullo, su principal recurso, además de Alheira de Mirandela –séptima maravilla de la gastronomía portuguesa– y su gente, es el olivo y su aceite.