El Santuario de la Virgen Peregrina es una construcción de finales del siglo XVIII. Es la patrona de la provincia desde 1954 y del Camino Portugués a Santiago. Su día grande se celebra el segundo domingo de agosto. La mayor particularidad de este santuario es su planta en forma de concha de vieira, símbolo del Camino de Santiago y de los peregrinos.
En el exterior, tres imágenes que representan a la Virgen, Santiago y San José, con vestimentas de los peregrinos. En la entrada destaca una concha natural gigante para agua bendita, regalo del contraalmirante pontevedrés D. Casto Méndez Núñez, quien la trajo desde el Pacífico para agradecer a la Virgen su victoria en la Batalla de Mindanao (Filipinas).
La imagen actual de la Virgen es del año 1867, obra del escultor catalán Luis Vermell, en sustitución de la tallada en 1776 por el pontevedrés José de Torres, y cuenta con un gran número de trajes bordados. La figura del Niño es de Gambino de 1814.