La construcción de este templo dedicado a santa Lucía y al Sagrado Corazón de Jesús comenzó en 1904 y no concluyó hasta 1959. Tras la muerte de su autor, el arquitecto Miguel Ventura Terra, en 1919, le sucedió su discípulo, el arquitecto Miguel Nogueira.
El estilo arquitectónico es de inspiración románico-bizantino y se integra en la arquitectura historicista que marcó el cambio de siglo. Sus imponentes rosetones son los más grandes de la Península Ibérica y los segundos más grandes de Europa.
Se puede subir al monte de Santa Luzia en funicular (elevador), en coche o por las escalinatas. Desde este lugar se divisa una importante extensión del valle del Lima y gran parte del litoral, al norte y al sur del estuario del río, así como la frondosa sierra. La revista National Geographic consideró este paisaje como el tercero más bello del mundo.