Originario de la región de Minho, el Papas de Sarrabulho es uno de los platos más típicos de la cocina portuguesa.
A base de sangre de cerdo, carne de pollo, cerdo, salpicão, jamón, chorizo, comino, limón y harina de pan o de maíz, este plato se sirve como sopa o acompañamiento de los Rojões à Minhota y debe saborearse con un vinho verde tinto.
Es una sugerencia más apetitosa cuando hace frío en invierno, ya que es una comida calóricamente pesada.
Ingredientes principales:
- Sangre de cerdo fresca y coagulada – Esencial para darle su textura y sabor característicos.
- Diversas carnes de cerdo – como trozos de jarrete, tocino, hígado y otras partes.
- Harina de maíz o pan desmenuzado – Se utiliza para dar consistencia a las gachas.
- Especias y condimentos: suelen incluir comino, clavo, pimienta, sal y, a veces, un toque de vino.
- Agua de cocer la carne – Para enriquecer el sabor del caldo.
¿Cómo se hace?
- Cocción de la carne: La carne de cerdo se cuece con las especias, creando un caldo aromático.
- Preparación de la sangre: La sangre se mezcla con el caldo caliente y se espesa con harina o pan.
- Incorporación: La carne desmenuzada o en rodajas se añade a la mezcla para conseguir un plato contundente.
- Acabado: Se ajusta el condimento y las gachas se sirven calientes.
¿Cómo se sirve?
- Normalmente, las gachas de sarrabulho se acompañan de rojões à moda do Minho, un plato de trozos de cerdo fritos en grasa.
- Puede espolvorearse con comino o servirse con un poco de pan.
Es un plato de sabor intenso y rústico que refleja la tradición gastronómica de Braga y de la región del Minho, a menudo asociada a reuniones familiares o fiestas típicas.