Fue construida en el siglo XVI, sustituyendo a la primitiva capilla que estaba dedicada a San Sebastián. A finales del siglo XVIII, principios del siglo XIX, fue destruida y reconstruida un poco más al sur, donde se ubica actualmente. En 1902, la capilla pasó a llamarse Nossa Senhora da Saúde, convirtiéndose en la patrona y siéndolo hasta el día de hoy. Al ser el mayor espacio verde de Esposende, además de la capilla y su devoción, el número de visitantes a este lugar es grande, tanto para la capilla como para picnics y paseos. También cuenta con un quiosco de música, así como una fuente.