El puente de los Tirantes se inauguró en el año 1995. Nueve años más tarde fue seleccionado como uno de los 33 puentes más singulares de la historia de España por el Ministerio de Fomento. Se trata de una obra de Leonardo Fernández Troyano y Javier Manterola que plantearon un puente de un solo vano de 120 metros de largo, torre de hormigón armado de 63 metros de altura de la que salen 17 pares de tirantes, los delanteros sujetando el tablero, y los traseros apoyados en dos bases de hormigón en tierra firme, actuando a modo de contrapesos que equilibran los esfuerzos de la torre.
El puente marca el inicio de las sendas que discurren por el río Lérez y llegan a la Illa das Esculturas, un lugar de gran belleza natural donde disfrutar del senderismo, el arte y la cultura.