La primera mitad del s. XVIII es benigna para Galicia. Es un período de bonanza económica en el que las instituciones eclesiásticas y nobiliares invierten en obras arquitectónicas y artísticas. En esta época Celas era la parroquia más importante del actual territorio que comprende Culleredo, por lo que no es de extrañar el emplazamiento de esta casa rectoral.
La primera noticia de su existencia data de 1752, apareciendo nombrada en el catastro del Marqués de la Ensenada, en el que se describe y detallan los bienes de la misma.
El inmueble es el único de los ocho pazos protegidos por el catálogo de patrimonio que pertenece al Ayuntamiento. En la actualidad, alberga diferentes usos públicos.