Bacalao a la Viana fue el plato seleccionado por los restaurantes del municipio como “plato icono” de Viana do Castelo, cuyos sabores identifican a la ciudad y a sus gentes. En aceite de oliva puro y ardiente, una rodaja de bacalao, musculosa y acostumbrada a los rigores de los mares del norte, se acurruca con unas patatas de forma considerable. Ya dispuestos sobre la porcelana blanca, los tres elementos acogen la frescura de una col portuguesa, brillante y húmeda, y un plato de cebolla que se asemeja a un ingrediente mágico. Para completar el conjunto, una rebanada de pan de maíz, oscura, sabia, esencial.