El segundo sábado de agosto, San Cibrao ensalza su cultura marinera recreando la leyenda de su famosa sirena conocida como “A Maruxaina”, para algunos ayudante y colaboradora con los marineros y para otros una traidora que los engaña desviándolos de su ruta. En este día, la gente del mar porta por las calles a la sirena Maruxaina en una procesión que culmina en la playa de O Torno, donde se le realiza un particular juicio que termina con su indulto.